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Cómo usar el storytelling para vender

Hace algunos post ya te poníamos en situación sobre qué es el storytelling y para qué sirve. Hoy queremos profundizar en esta técnica para que aprendas a crear atmósferas con tus historias a través de tus textos o relatos.

¿Por qué contar historias?

Resulta que hay estudios que afirman que en este mundo de infoxicación en el que ahora vivimos, con publicidad por todas partes, bombardeos de publicidad viendo noticias online, en papel, escuchando música, viendo vídeos, andando por la calle… no llegamos a prestar la atención suficiente a aquello que nos quieren vender. Y las historias (bien contadas) venden mucho. El receptor conecta emocionalmente con la marca o la persona que le está contando la historia y retiene los mensajes que le llegan, lo que te podrá asegurar que tu marca será recordada; además el storytelling genera engagement con tus usuarios y ayuda a fidelizar clientes. Como muy bien dijo Maya Angelou, “la gente olvidará lo que dijiste, la gente olvidará lo que hiciste, pero la gente nunca olvidará cómo la hiciste sentir”.

Tipos de storytelling para empresas

Dos de las ramas de storytelling que las marcas deberían aplicar a sus empresas son los siguientes:

Brandstory

Aquella historia directamente relacionada con tu marca; la historia de quién eras, quién querías llegar a ser y cómo llegaste hasta ahí.

La historia puede estar basada en hechos reales, siendo tú protagonista y contar cómo por un problema personal deshiciste tu vida y llegaste donde estás ahora, por ejemplo. Contando los comienzos de la marca, por qué esos productos o servicios y no otros, etc.

Leyendas o mitos también pueden ser utilizados para enganchar a los usuarios a saber más. Los clientes valoran las empresas con raíces, con historia, y si despierta curiosidad, querrán probar el producto.

Historia basada en unos valores adquiridos sobre otra historia, como por qué tus productos o servicios son respetuosos con el medioambiente, por ejemplo.

Storydoing

Esta rama del storytelling busca ir más allá de la narración de una historia, busca involucrar a las personas y que éstas vivan una experiencia con la marca. Una acción de storydoing potente involucrará a los usuarios de una manera impactante y generará interacciones en redes y medios, llegando incluso a viralizarse. Un buen ejemplo de storydoing puede ser el que diseñó la marca North Face junto a Spotify: North Face quería dar a conocer su nueva línea de ropa impermeable así que se creó una acción que consistió en subir una canción a la plataforma de música que solo se podría escuchar durante los días de lluvia, de forma que el público tuvo que mantenerse atento a la meteorología para poder escucharla. Esta acción, por supuesto, se viralizó.

Cómo usar el storytelling para vender

Te contamos algunas técnicas básicas para que puedas empezar a aplicarlas en tus textos y tus contenidos.

1.     Cuenta historias con un punto A que lleve hasta el B

Contando una historia con un orden cronológico te asegurarás de que tu mensaje llegue a calar y pueda ser fácilmente reproducido por tus usuarios al ser compartido.

2.     Cuenta historias con sentimiento positivo

A pesar de que una de las claves en el storytelling es dar en los puntos de dolor, es decir, que se debe mostrar un problema en el nudo de la historia, si el contenido termina con un buen sabor de boca, es decir, con un sentimiento positivo, con una solución al problema, tu historia tendrá más posibilidades de ser contada. Te aconsejamos que, a ser posible, ese problema sea resuelto gracias a tus productos o servicios o que éstos fueran la inspiración para encontrar la salida a tus problemas (siempre que sea real) para estimular la venta.

3.     Ten en cuenta cómo vas a comunicar

Hacer uso de un lenguaje natural, coloquial y cercano te dará muchos puntos para enganchar al usuario. La audiencia debe de encontrar una lectura o un contenido de fácil comprensión y escucha.

4.     Cuenta una historia personal

Esta técnica aumenta las posibilidades de captar la atención de tu audiencia. Si el usuario se encuentra con debilidades, deseos, necesidades… se sentirá identificado de alguna manera contigo o con tu marca. Ten en cuenta que si cuentas tu historia, solo existirá tu historia, no habrá ninguna igual, ¡aprovecha esto para diferenciarte de la competencia!

5.     Si conoces el perfil de tu audiencia, hazla partícipe

Si tienes los deberes hechos y tienes desarrollado tu buyer persona, este apartado puede valer oro. Puedes integrar dentro de tu historia a tus usuarios, convirtiéndolos en personajes de la historia, algo así como para hacerle entender que son esenciales para aquello que estás creando o trabajando. Sabrás cuáles son sus puntos de dolor, sus debilidades y sus necesidades ¡úsalas en tus historias!

6.     Trata tus puntos de dolor

La superación de obstáculos genera engagement; a la audiencia le gusta conocer la parte más humana de las marcas, saber que las personas que están detrás también cometen errores o que tienen que resolver problemas en su día a día. En definitiva, que comparten las lecciones que han aprendido en base a los golpes de la vida.

7.     Termina con un final feliz

Este punto viene estrechamente ligado al anterior, en el que la audiencia ya está enganchada en un nudo, un problema o problemas que deben resolverse. La resolución de estos con un final feliz evocará emociones positivas que se relacionarán con la imagen de tu marca, productos, servicios… Recuerda que la gente recordará como le hiciste sentir.

Si empiezas a ponerte las pilas con el storytelling, la percepción sobre tu marca mejorará, los usuarios sentirán confianza hacia ti y te ayudará a diferenciarte de la competencia. ¡Cuenta tu historia con las claves del storytelling y a marcar la diferencia![/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]